domingo, 1 de septiembre de 2013

Mi septiembre



Se hizo esperar nueve meses,para llegar, pero ya está aquí : ¡SEPTIEMBRE!

Siempre me gustó este mes por motivos obvios, es mi cumpleaños, en 14 días cumplo 31 años, y como cada año, antes de que llegue eso me toca felicitar a los dos pilares de mi vida, mi abuela, que tan bella como siempre ,cumple años diez días antes que yo, con su sonrisa infinita y su corazón enorme que es refugio de todos, guardiana de secretos,creadora de amor, maestra sabía en lecciones a voz bajita, la paz de las cosquillas en el brazo en la sobremesa, señora por derecho y mujer valiente y fuerte que me emociona cada vez que me dice "te quiero mucho, que no se te olvide nunca", como si fuera posible olvidar sus infinitos besos y sus abrazos cuando llego a su casa gritando "abuela, ya estoy aquí".

Seis días después es el santo de mamá, mi mamá, y me da igual que suene infantil decirlo así, es mi madre y siempre la veré como la protección y el amor independientemente de los años que yo cumpla, por que me siguen temblando las pestañas cuando me llama Pili, por que mi madre, al contrario que el resto de las madres, cuando se enfada me acorta el nombre en vez de llamarme por el nombre completo.

Evidentemente, mi madre es la mejor madre del mundo, y lo siento, pero no admito réplica, ¡lo es y punto! Mamá siempre me apoya aunque a veces no entienda el por qué de mis decisiones o no esté de acuerdo, y siempre es su "bueno nena, tu haz lo que tu veas mejor" lleno de comprensión, aunque alguna vez (más de alguna me temo) le haya matado por dentro la decisión que yo haya tomado. Mi madre no es mi amiga, es mi madre, aunque muera por irme una noche de fiesta con ella, mi madre no es mi amiga, es mi madre, aunque nos intercambiemos tacones, mi madre no es mi amiga, es mi madre, aunque le cuente todas mis intimidades, mis miedos, mis indecisiones y todo lo que me pasa por mi cabeza de rubia loca.

Después de eso ¡llega mi cumpleaños! 31 años, en los que he sido inmensamente feliz, incluso en los momentos no bonitos, incluso cuando dejamos de verle a él. El día de mi cumpleaños cada vez que suena mi móvil me da un vuelco el corazón, y siempre, a las doce en punto del mediodía mamá me llama, para felicitarme, ni un minuto antes, ni un minuto después, y como todos los años, mi hermana, mi mitad, Celia, me saca de quicio esperando a la noche para felicitarme, me desquicia esa costumbre, pero si lo hiciera antes se me haría raro, ¡Celia y sus genialidades!

Pero este año, mi septiembre es mucho más. Este año, al terminar el verano (el 21 de septiembre, gracias Rocío por recordarlo) estaré en Cádiz, en el bautizo de Mini (Alicia), mi muñequita preciosa, y aunque me ha creado el dilema, al final iré. Me ha dolido tener que elegir entre el bautizo de Mini y el de Mario, ambos el mismo día, en provincias distintas..... ¡Quiero ir a los dos!

Cuando vuelva de Cádiz será otoño, y antes de que octubre nos ocupe el calendario yo ya estaré liada buscando los temarios y felicitaré a mi adorada Ratón y a Dani (sí, en mi familia septiembre nos la pasamos celebrando), que aunque apenas los vea ¡los adoro!

Septiembre, mes de vuelta al cole, de cambios, de alegría, de proyectos, y para mí, de felicidad infinita.

¡Bienvenido Septiembre, como te has hecho esperar!

2 comentarios:

  1. Septiembre es un mes super especial y sobre todo porque es tu cumpleeee!!!
    Te mando un beso enorme rubia y decirte que eres genial y me ha encantado que hayas aparecido en mi vida!!1

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  2. acabo de morir de amor, gracias cariña

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